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martes, 5 de mayo de 2015

03 de Mayo del 2015 - Mensaje de la Virgen María a través del Vidente Marcos Tadeu

Jacareí, 03 de Mayo del 2015
Transmisión de las Apariciones Diarias en vivo vía internet en la WebTV 



MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA



“Mis Amados Hijos, hoy, cuando ya están contemplando y meditando Mi Mensaje de Fátima, vengo en este mes de mayo consagrado a Mí a decirles: “Soy la Señora del Rosario y por el Rosario triunfaré en sus vidas y en sus familias, y en el mundo entero.”

¡Cuántas cosas admirables Yo hice en Mis Tres Pastorcillos de Fátima por el Rosario! Les comuniqué Gracias Inconmensurables y Abundantes de Mi Corazón. Y sobretodo, encendí en ellos una Llama de Amor inflamadora por el Señor y por Mí, que nada, ni el sufrimiento, ni la enfermedad, ni la persecución, nada pudo apagar.

A través de la Oración del Rosario de ustedes rezado con el corazón, la Oración Viva, Yo también encenderé en sus corazones esa misma Llama si ustedes quisieren.

A través del Rosario les llevaré a una Gran Santidad de Vida como llevé a Mis Pastorcillos de Fátima, en poco tiempo, al tope de la Santidad. ¿Y saben cuál es el secreto de la Santidad de Mis Pastorcillos? Envés de ellos mismos querieren esculpir la Santidad en sus almas, ellos prefirieron entrar en el molde de Mi Corazón Inmaculado, donde Yo pude entonces, derretir sus almas y moldarlas a propia imagen y semejanza de Mi Corazón.

¿Cómo ellos hicieron esto? Por su docilidad y obediencia a Mi Voz. Nunca negándome nada, siempre diciéndome “Sí” y teniendo para Conmigo una obediencia sin límites. Por eso, ellos se santificaron en tan poco tiempo.

Si ustedes hicieren la misma cosa que Mis Pastorcillos de Fátima hicieron, entrando en la forja de Mi Inmaculado Corazón, por el “Sí”, por la obediencia total de ustedes a Mi Corazón, Yo les derretiré también. Derretiré sus corazones duros como el acero y les daré forma, igual formato al de Mi Corazón Inmaculado, llevándoles a la más alta Santidad, a Mi Imitación en poco tiempo.  

Fátima es una verdadera forja de Santos, y los primeros Santos que forjé fueron Mis Pastorcillos. Busco almas que también quieran entrar en esta forja para derretirlos y darles el formato de Mi Corazón Inmaculado.

Aquí, donde Yo vine también hacer una gran forja de Santos, deseo que ustedes entren en Mi Corazón Inmaculado y se dejen moldear por Mí, déjenme derretir sus corazones duros, hasta plasmarlos, hasta moldearlos de acuerdo con Mi Corazón Inmaculado. Para que en poco tiempo, Yo también pueda llevarles a una alta cumbre de Santidad, como llevé a Mis Pastorcillos y pueda darles la propia semejanza de Mi Inmaculado Corazón.

Vengan a Mí, denme su “Sí” y Yo les haré los “MAYORES SANTOS QUE EL MUNDO JAMÁS VIÓ” como dijo Mi Siervo, Mi Hijo Predilecto: Luis Grignion de Montfort. Ustedes serán los Santos de los Últimos Tiempos, los Santos de Mi Corazón Inmaculado, que irán a incendiar el mundo entero con Mi Llama de Amor. De ustedes quiero tan solamente, únicamente el “Sí” y una obediencia sin límites a Mí.

Fátima es la Aurora del Triunfo de Mi Corazón, del Reino de Mi Corazón. Allí les prometí por la primera vez con palabras claras e inconfundibles: “Que en el final, Mi Corazón Inmaculado Triunfará del gran dragón rojo, de Satanás y de todas las fuerzas diabólicas en el mundo.”

Aquí, donde Yo vine terminar aquello que comencé en Fátima y llevar Mi Plan a su triunfo, a su plena realización, de ustedes espero una obediencia y un amor sin límites como la de Mis Pastorcillos. Para que así, realice en ustedes Mi Plan de Salvación hasta llevar al mundo entero al Reino Glorioso del Corazón de Jesús que unido al Mío, transformará el mundo entero en un gran y bello jardín de Santidad.

¡Recen, recen! Solamente por la Oración con el corazón, ustedes pueden comprender Mi Plan y lo que Yo quiero de cada uno de ustedes.

Continúen rezando el Rosario y todas las Oraciones que Yo les pedí aquí con el corazón, para que día tras día, Yo realice el Plan de Mi Inmaculado Corazón en ustedes. Y así, apresure la Hora del Segundo Pentecostés, de la Segunda Venida del Espíritu Santo, que transformará el mundo entero en el gran oasis de Paz y Amor, donde Dios será amado y adorado por todos. Y donde finalmente, ustedes vivirán en una Era Interminable, Infalible de Paz y de Amor.

A todos bendigo con amor: de FÁTIMA… de MONTICHIARI… y de JACAREÍ.” 

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